domingo, 25 de marzo de 2012

--Reducción de marchas forzada al fracaso--

Eché raíces en la tierra del olvido. De TU olvido. Pero ya nada importa. Me quedo aquí tumbada en mi hamaca, en mi paraíso personal diseñado a mil gustos diferentes, para poder invitar a quien llegue, para poder subsanar lo que quede,y decir que por mucho que piense en tenerte, me importa un comino no hacerlo.
Que ya me he dado cuenta, que las cosas vienen, van, se quedan o pasan de camino a otro lugar. Me quedo con la d) para tí. Me quedo feliz, conmigo, aquí.

No es sed de venganza, que puedes estar tranquilo, que no tengo nada en contra.

Es el máximo nivel de crueldad que mi manera de buena persona me permite. Traducción : Nula. Incluso invertida.

 He cambiado, la parte mala de mí sale a veces, pero mi parte débil la logra reducir. Y me invade. Y llora con la vaga impresion de "lo que pudo haber sido". Aún así, tengo algo claro, aunque pudo haber sido, me interesa en nulo nivel lo que pueda hacer ahora. Que hay demasiados peces para quedarme con un inútil boquerón. EL minúsculo grano de arena que fue y que sigue siendo. Fue un día de mi vida, pero no de esa que dura dos días. Uno en reducción.

Reducción de marchas forzada al fracaso. Siempre me dije que debía no haber probado, ahora me arrepiento de no haberme hecho caso. Una imbécil encerrada en un cuerpo de sensata soy, y cuyo subconsciente juega peores malas pasadas que el resto de ellos. Harta me encuentro, no me mantengo, pero tampoco me derrumbo porque no valió la pena. ¿O tienes algo que objetar a eso?  Fui menos para tí de lo que eres para mí.


Mantengo mi paso firme y bamboleante al viento que me susurra qué caminos tomar, con qué piedras tropezar y cuál puede ser mi lugar.

jueves, 15 de marzo de 2012

Montañas rusas que suben, bajan, y te llevan con ansia.

Estoy aquí, sola, en mi mente, entre mi cordura y mi locura, que se disputan mi vida a partidas de sensatez. Yo me quedo aquí solita, prefiero observarlo todo de lejos. Mirar mi vida desde otro punto de vista para intentar comprender porqué. Porué me cuesta tanto reecontrarme, poruqé ésta montaña rusa no deja de dar loopings y se establece un poco. Quiero asentarme y decir que estoy bien. Pero a la vez que lo digo, al instante, vuelvo a caer. El vagón es mi vida y la ocupante una  sincera mirada desvanecida. Estoy harta de subir,  subir, y al instante bajar. Caer en picado desde mi cielo hasta su subsuelo. No quiero y tampoco puedo seguir así. Quiero estabilidad, todo en su justa medida. No quiero que vengas y al instante te vayas, felicidad. Me siento prosionera de estos cambios, de ésta vida ines-table.
Y no niego que me muero de miedo por pensar que ésto afecta aunque sea en lo mñas mínimo a mi vida. Ésto es parte de mi diario mal escrito y el corazón con el que palpito. Es mi situación, mi manera, mi razón y mi opresión. No quiero más cambios, no puedo soportarlos.
**No es nada fácil cuando estás perdido, buscar la música entre tanto ruido**

domingo, 11 de marzo de 2012

Contradicciones. Malabarismos imposibles empapados de ilusiones.

Diferente.
Un imposible que se hizo posible antes de desvanecerse en lo perceptible.
Mis lágrimas se esconden bajo sonrisas de labios blancos resaltantes sobre mi piel de vampiro.
Mis contradicciones están de acuerdo en llevarme la contraria.
Mi azul es verde y mis curas duelen.
Mis posdatas van al principio y  mis ruidos son mudos.
Mi pelo suelto al viento no se enreda y mi voz cuando está ronca llega a ser melodiosa.
Mis besos son de hielo y mi azúcar de sal.
Mis acordes estan desafinados contra el mundo y las canciones tienen faltas de biografía.
Me invento palabras sensatas sin sentido y apunto cosas que nunca escribo.
Y aunque sepa que mi lamento no es voz para este mundo, sigo queriendo diferenciarme del ruinoso vicio de darlo todo por hecho, conformarse, y confirmarse sin tener nada hecho.

sábado, 10 de marzo de 2012

Y mi chupa de cuero está desgastada por desgajes... de tí.

Incalculable el valor de tus besos al decirme que no querían volver a rozar mis labios e inaudibles los te quieros que nunca salieron de ellos. Es transparente mi vida en torno a tí, eso me gustaría defender ante tu mirada de niño perverso. Pero me pierdo en la inmensidad de tu universo paralelo y secante a la vez con el mío. Si pudiera definir lo que sentí...simplemente no lo haría. No sé sacar cosas de mi mente que no sean en relación a mi vida insultante de certezas.

Yo con mi look de cuero y camperas, sombrero perdido con el viento que peina mi pelo atado a una trenza de raíz llena de momentos llenos de melancolía. Mis botas marcadas de andar y desgastadas de pisar recuerdos inservibles que ahora te llaman a tí. Te quieren pisar. No se lo permito. Pero se me hace difícil impedírselo. Mis pantalones ajustados pitillo con rotos en las rodillas de tanto suplicarle a la vida un poco de justicia que dejan ver las heridas que has marcado en mí. Mis pulseras de chica dura que no se deja vencer por nada... excepto por tal y cual. Mis pendientes marcados con el ritmo de mi corazón cuando suena esa canción. Mis manos libres y suaves de tanto tocarte sin rozarte y mis uñas pintadas de sangre de mis días bastardos.Mis ojos perdidos sin saber de dónde comer para vencerte. Mis labios hechos trizas de tantas ganas que los han atacado de quererte besar. Mi nariz ya incapaz de no oler tu colonia a cualquier instante inesperadamente y mi cuello desgajado de tantas idas y venidas, de tanto estirarme para ver por encima del horizonte de tus manos. Mi piel rota a trozos de ilusión despedazada entre esas palabras estilo Johny Cash, al hacerme llorar. Mi cintura solitaria te echa de menos, echa de menos tus caricias y tus abrazos, pero se conforma con el aire que la roza al no tenerte aquí... o allí. Mis piernas que tiemblan con sólo pensar en el vago recuerdo de lo que las hiciste tiritar y mis pies, descalzos que ya no rozan los tuyos, pegados al suelo. SIN PODER VOLAR.

Y que pasaste por mi vida un poco "Living Las Vegas".

miércoles, 7 de marzo de 2012

Hermandad de sangre horchatada.

-¿Tú qué? ¿Para cuándo?
+Para siempre.
-¿Cómo que para siempre?
+Pues eso, para siempre. Esto. Que es para siempre.
-¿Perdona? ¿Por qué?
+¿Hace falta tener razones para querer estar a tu lado toda la vida? ¿Hacen falta razones para pedirte que no te vayas nunca? ¿Hace falta que te lo diga? O simplemente, con que confíes en mi, ¿Vale?
-No sé, supongo... Tampoco sé demasiado de cosas que duran para siempre, y ésto no llega a ser un acuerdo firmado.
+¿Ah no? ¿No está firmado? ¿No dijiste que me quieres, que menos mal que yo te entiendo, que me quieres siempre a tu lado, que no quieres perderme?
-Lo dije, lo digo y lo diré. Y lo repetiré hasta la saciedad si hace falta para tenerte conmigo.
+¿O es que tú sólo sabes vivir con acuerdos, recuerdos y dolores? No deberías. No hagas planes, salen mal. Vive al momento, segundo tras segundo.
-No. Sé vivir contigo, y eso es lo que me vale. Sé que te quiero, que quiero seguir, y que nunca acabe. Eres mi hermana, esa que siempre quise tener, esa que me ayuda, esa gemela inseparable de mi ser.

CMP.BMH.

domingo, 4 de marzo de 2012

- Manifiesto a una vida plena. Mi ley de vida traicionera. -

Pd antedecente: Escuchad las canciones. Están ahí por algo.

Es un trato firmado con sangre seca de mi corazón resentido. Escribo punto a punto los decretos de éste pacto de guerra que acabó. Va a ser más que un corte transversal en la rutina de mi inusual vida. Serán manifiestos de una vida vivida, viviente y por vivir.
Poco a poco cambio a mejor. Y mucho a mucho pierdo la torpeza de mi vida. Tomo las riendas de mi camino y pulo las piedras que me impiden seguirle. Barro la niebla que me impide ver lo que no quiero, y eso, es lo real.
Las frases que puedo decir no son insensatas, y quizás caigan al vacío en las cabezas de lectores, pero a mí me importa haberlas escrito y no haber repetido.
Sigamos con el pacto. Será una vida llena de mí, que mi cabeza piense en vivir y mi boca sólo quiera sonreír. Quizás conquiste, quizás desatine, pero al menos me tendrá en vuelo a cien mil metros sobre el cielo, ya que tres son pocos.
Me visitan duendes que me hablan de séptimos cielos inútiles e inexistentes pero que hacen aparecer en ciertos momentos. No quiero de eso. Eso estará prohibido.
No quiero falsas ilusiones ni vagas esperanzas. Lo que quiero son inseguridades que tornen a fijas teorías comprobadas. Quiero una ley de vida mía, construida por cabos sueltos que probablemente vuelvan en ciclos a mis recuerdos, y que duelan. Y quizás llorar océanos o reír a carcajadas, y después disimular, a ver quién puede más.
Es un desafío a lo tópico-típico-utópico. Es un cambio radical, puede que afecte al futuro, pero así podré controlarlos. O puede que sea la misma loca de siempre que por no poder, no quiere. Ni debe.
Con este pacto pretendo contestar a todas las preguntas por cuestionar. Pretendo establecer la locura como base de mi vida vagabunda. Que el menú del día sea una lágrima escondida bajo una enorme sonrisa. Deliberar acerca de si mi libertad es lo que en realidad me vale.
Intento apaciguar la relación cabeza-corazón que en guerra se debaten la custodia de mi incesante plenitud. pretendo controlas mis instintos de lince, de mis ojos de gata. De mis letras amargas y mis acordes descoloridos.
Y como esto es un tratado, quizás se haya alargado un infinito... pero vale la pena dejar huella.


sábado, 3 de marzo de 2012

*-Ganas de menos. Tiempo de Más-*

Lo echo de menos. Echo de menos nuestras conversaciones y nuestras discusiones. Nuestros roces cuya reconciliación era  mejor que cualquier tarde de verano tostándonos con nuestro calor. Mis rayadas y sus "tú lo vales". Su ilusión depositada en mí y mis pocas ganas de hacerle caso. Mi modestia y su orgullo. Nuestras contradicciones desembocantes en guerras.

Es verdad, lo reconozco. Le echo de menos. Quiero volver a sentirle, mirarle a los ojos y hacerle mío de nuevo pero ahora está desaparecido. Le llamo y no hay respuesta. Le llamo pero no tiene valor que lo haga. Y sin él, quiero bajar la velocidad. De momento está perdido pero un día, espero que no tardando, reaparezca por sorpresa.

Mi corazón vagabundo perdiéndose en el olvido lleva...


Lo quiero todo más lento, quiero tardar más en reaccionar y poder despiezar las ideas antes de decidir. Darme un tiempo, me aclaro y vuelvo. Le recuerdo y mis ojos gritan que echan de menos la humedad. Pero ella no hace nunca caso, simplemente vuelve al ocaso. Llega otras veces cuando no la llaman. Y de repente los convierte en océanos.

Pero siempre llega la inoportunidad. Lo que quieres en un momento aparece en otro que lo rehuyes. Casualidades de la vida o no, no me atrevo a llamarlo destino, pero colocan mi caos mental, y eso me descoloca a mí. Una nube que de repente se convierte en un intenso tornado o simplemente se limita a dejar caer pequeñas gotas de agua bajo las que salgo a cantar. Son ganas de frenar del todo, de estar harta de que todo llegue sin avisar, acepto que llegue de repente, pero no que ni siquiera llame a la puerta.
Tras bajar la velocidad siempre acabas observando todo mejor. Tras la tormenta siempre llega la calma y bajo mi mesa se asoma el monstruo de la desolación segundos antes de que vuelva. Le siento cerca a momentos pero son sólo sensaciones, no sentimientos. No está y no creo que vuelva en un tiempo. Se asustó la última vez y se perdió a su mundo. Creó la coraza que tanto temo siempre, y ahora es más fuerte que otras veces. Y sé que me va a costar quitarle la fortaleza para que vuelva a ser él, pero cuando llegue el momento se desgastará sola.

Está asustado recluido en su rincón, pero con mis simples ayudas cobseguirá ser él de nuevo.


Corazón: Te quiero. Te extraño.

¿Conocerme? Atrévete.

Mi foto
Somos lo que el mundo nos deja ser. Soy lo que mi rebelión contra el mundo me hace ser. Soy una sonrisa pegada a una cara. Un sueño inés-perado que me hizo creer en mí. Soy una melodía que suena infinitas veces durante el día. Soy la armonía más desorganizada que pudieses encontrar y la chica cuyos sueños son imposibles, pero sigue soñando pese a todo. Un espíritu luchador que NUNCA, ¿me has oído? NUNCA, se cansa.