lunes, 5 de agosto de 2013

Cada camino marca la diferencia.

Cada uno tiene su camino y cada uno forja sus barrotes con el hierro que le fue dado y los golpes que le ha ido dando la vida. Y cada uno así crea una vida diferente de las demás.

Llega un momento, en la vida de toda persona, en el que te das cuenta de que todo lo que viviste sirvió... Para mucho. Eres quien eres, así y como eres, y todo gracias a haber caído y caído sin fin, hasta haberte levantado. Y ésto, cientos de veces.

Y llega un momento en el que dejas de creer en todos los cuentos que pueden salir de las bocas, supuestamente inocentes, de toda persona que te rodea. Ahí, cuando te das cuenta de que los hechos son lo que reamente importa. 

Y persigues un sueño, una realidad, un estado de libertad casi como un nirvana... Persigues la felicidad. 

¿Y la felicidad? ¿Qué coño es? Sólo un lienzo en blanco que cada uno decora al gusto. Es imposible completarlo, siempre quedarán recovecos blancos imposibles de pintar.

¿Conocerme? Atrévete.

Mi foto
Somos lo que el mundo nos deja ser. Soy lo que mi rebelión contra el mundo me hace ser. Soy una sonrisa pegada a una cara. Un sueño inés-perado que me hizo creer en mí. Soy una melodía que suena infinitas veces durante el día. Soy la armonía más desorganizada que pudieses encontrar y la chica cuyos sueños son imposibles, pero sigue soñando pese a todo. Un espíritu luchador que NUNCA, ¿me has oído? NUNCA, se cansa.